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Fecha: | Sun, 6 Apr 2008 23:12:24 +0200 |
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Al hilo de lo que comenta Jesús...
Respecto a la educación musical que recibirán nuestros hijos en la escuela y
en el instituto no soy optimista, no por el número de horas que tengan a la
semana ni por la pertinencia de los contenidos sino porque, como insinuaba
en el mensaje anterior, sus maestros no tendrán la formación adecuada (sin
intención alguna de ofender a nadie).
Puede que no tengamos la capacidad de cuestionarnos la realidad que hemos
heredado y aprendido generación tras generación. Hace 400 años los maestros
de capilla ya concursaban-opositaban. La diferencia es que ese modelo era
válido y tenía una funcionalidad. Actualmente hay modelos que ya no resultan
válidos, por poner un ejemplo amplio, me viene a la mente el proceso de
desprofesionalización de las profesiones (que ha descrito Schön) que se
viene produciendo en las últimas décadas.
No conozco los trabajos de John Paynter (Jesús, puedes citar alguna
referencia?) pero está claro que aquí en España los contenidos de Secundaria
no son otra cosa que una versión light (pero muy grasienta) de los planes de
estudio tradicionales de las carreras universitarias; contenidos que nos
acompañan a lo largo de los años haciéndose más densos y complejos, una
perversa interpretación del "curriculum en espiral" del que hablaba J.
Bruner. El nuevo concepto normativo de "competencia" podría suponer un
cuestionamiento del modelo, pero está por ver.
Si comparamos el curriculum de Música en Secundaria con el de una
licenciatura en Musicología y con el temario de oposiciones para el
profesorado, las similitudes saltan a la vista ¿es eso necesario? ¿es útil
para todos? En este sentido me temo que el enemigo lo tenemos en casa, por
no decir que somos nosotros mismos, que hemos aceptado como dogma este
modelo.
Modelos que producen graves perjuicios... adolescentes que no saben expresar
sus ideas ni oralmente ni por escrito, que no saben utilizar su voz ni son
capaces de reproducir con su cuerpo la secuencia rítmica más simple a no ser
que sea por pura imitación, etc. Y eso no lo arreglan más horas de clase.
Gran parte de los españoles no pueden hablar inglés, a pesar de haber pasado
media vida estudiándolo.
Las preguntas que plantea Jesús son muy interesantes, pero no me parecen
preguntas clave. Yo me pregunto...¿qué conocimientos y capacidades musicales
deberían desarrollar todas las personas? ¿Quién es la persona cualificada
para ayudar a conseguirlo?
Puede que sean preguntas poco prácticas para aquellos que trabajan por
mejorar el sistema, pero necesarias para los que pretendan cambiarlo (aunque
solo sea para andar por casa ;-)
Jose Mª Caracena
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